Los Tomateros de Culiacán son los primeros clasificados a semifinales tras una contundente victoria 6-2 frente a los Cañeros de Los Mochis. Cuadrangulares de Romer Cuadrado y Peter O’Brien, sumado a buena actuación de Manny Barreda, le dieron el triunfo a los guindas.
Cuadrado encendió el poder guinda, con cuadrangular majestuoso por todo el jardín izquierdo, colocando a Culiacán adelante en el marcador 1-0, en la segunda entrada.
El ambiente se cargó de electricidad en la tercera. Andrés Álvarez conectó un imparable al central. La alegría se multiplicó cuando Herlis Rodríguez sacrificó su turno al bate para hacer avanzar a Álvarez a segunda base con un toque que demostraba la maestría táctica del equipo.
Entonces, en un instante lleno de expectación, Peter O’Brien envió un rodado que desataba la euforia en las gradas, llevando a Álvarez al plato y pintando el marcador de guinda: 2-0 a favor de Culiacán.
Los Cañeros en la cuarta entrada lograron empatar la pizarra con cuadrangular de dos carreras de Zoilo Almonte.
El sexto capítulo volvió a ver el fuego guinda. Joey Meneses conectó un sencillo al jardín derecho. Pero la verdadera magia sucedió cuando Peter O’Brien, se paró en el plato y disparó un cañonazo que tronó el estadio, para establecer una ventaja 4-2.
La entrada de las grandes emociones trajo para los Tomateros dos carreras más. Con dos outs, Andrés Álvarez y Herlis Rodríguez ligaron sencillos, para dejar el escenario puesto para el batazo que definiría el marcador final. CabaJoey Meneses hizo tronar su bat y el estadio con doblete productor de dos carreras.
En el montículo, Manny Barreda con la serenidad de la experiencia de juegos claves y la pasión que lo caracteriza, trabajó durante seis entradas permitiendo solo dos carreras limpias, tres hits, una base por bolas y un cuadrangular, para lograr la victoria.
El bullpen guinda nuevamente lució impecable. Miguel Aguilar contribuyó con un tercio, permitió un imparable y ponchó a un bateador. Por su parte, Sam Bordner sacó dos tercios y Roel Ramírez una entrada. El dragón que tira fuego, Spencer
Bivens lanzó una entrada, cerrando su actuación con un ponche para conseguir el pase a las semifinales de LAMP.
La actuación de hoy fue un recordatorio de que el béisbol es un juego de equipo, donde cada pieza, cada jugador, contribuye al mosaico de la victoria.