El No-Hitter de 1990
Uno de los momentos cumbre de su carrera ocurrió el 29 de junio de 1990, cuando lanzó un juego sin hit ni carrera contra los Cardenales de San Luis. Este logro lo consolidó como uno de los mejores lanzadores de su generación y añadió otra página dorada a su legado. Para los mexicanos y aficionados latinos, fue una celebración del orgullo nacional.