A una semana de haberse cerrado el mercado de cambios, los Los Angeles Dodgers entran a la recta final de la temporada con un margen mínimo sobre sus rivales divisionales. La ventaja sobre los San Diego Padres es de apenas dos juegos, la más corta desde el 15 de junio, lo que añade tensión en la lucha por el título de la División Oeste de la Liga Nacional.
En medio de este escenario, el manager Dave Roberts ha dejado claro que no moverá a Mookie Betts de su posición habitual como segundo en el orden al bate, a pesar de que su producción ofensiva en los últimos meses ha generado debate entre aficionados y analistas.
Confianza y estabilidad en la alineación
Roberts explicó que su decisión busca mantener estabilidad en la alineación y en el propio Betts. Un factor clave es que Will Smith, el candidato más lógico para ocupar el segundo turno, tiene descanso programado dos veces por semana, lo que impediría que esa solución se mantuviera de forma constante.
“No hay una mejor alternativa”, dijo Roberts a los medios en el Dodger Stadium el pasado lunes. Para el piloto angelino, la consistencia de Betts en ese lugar de la alineación es más valiosa que un cambio que altere la dinámica del grupo.
En términos de impacto, el propio Roberts y muchos dentro de la organización consideran que el orden al bate tiene un efecto limitado en el rendimiento general. Sin embargo, a la hora de decidir quién debe tener un turno extra en un juego cerrado, la elección sigue siendo Betts por encima de cualquier otro.
¿Betts de regreso al jardín derecho?
Otra de las inquietudes de los aficionados es si Betts podría volver a defender el jardín derecho en la recta final o en los playoffs. Roberts no descartó la posibilidad, pero indicó que, por ahora, el plan es mantenerlo como campocorto titular.
El cambio de posición solo ocurriría si surge una razón de peso, como sucedió el año pasado. Mientras tanto, la organización valora la versatilidad de Betts, pero confía en su aporte en el cuadro interior, donde ha sumado estabilidad defensiva.
Un cierre de temporada sin margen de error
Con poco más de un mes y medio de calendario regular, los Dodgers saben que cada serie será clave para asegurar el banderín divisional. El margen sobre Padres es mínimo, y cualquier tropiezo podría costarles el liderato.
El reto no solo pasa por mantener la ofensiva a tono, sino también por ajustar la rotación y el bullpen para llegar a octubre con el equipo en su mejor forma. En este contexto, la experiencia y el bate de Betts, junto con la solidez de Will Smith y las estrellas del roster, serán determinantes para definir si Los Ángeles retiene su corona divisional o si San Diego logra destronarlos.
