El peor comienzo de campaña de los Rojos desde la Gran Depresión agotó pronto la paciencia hacia Bryan Price.
Cincinnati despidió el jueves a Price tras un arranque con marca de 3-15, en lo que constituyó el primer cambio de manager en las Grandes Ligas esta temporada.
Los Rojos no habían destituido a un piloto a estas alturas de una campaña desde que el cubano Tony Pérez perdió el cargo en 1993, tras apenas 44 juegos.
Desde 2002, un manager no era despedido en abril, de acuerdo con la cadena ESPN. En aquella ocasión, cuatro pilotos se quedaron sin empleo ese mes, incluido Phil Garner, tras un comienzo de 0-6 con los Tigres, lo que marcó el despido más rápido en la historia de las Grandes Ligas.
Price cumplía su quinta temporada al mando de un equipo en reconstrucción, dependiendo de peloteros sin experiencia más que cualquier otro club durante su ciclo. Los Rojos han sufrido al menos 94 derrotas en cada una de las últimas tres campañas, hundiéndose en la cola de la División Central de la Liga Nacional.
Aunque los Rojos se han mostrado pacientes con los coaches durante la reconstrucción, atraviesan por su peor inicio de temporada desde 1931. Y ello desembocó en el cambio.
«Sentimos que debíamos actuar ahora. No podíamos darnos el lujo de esperar», comentó el gerente general Dick Williams durante una conferencia telefónica. «Sé que algunas personas opinan que es demasiado pronto, y ciertamente es temprano en la temporada regular, pero… tuvimos muchas oportunidades de observar a este grupo y de ver si tenía el comienzo que esperábamos. No ha sido así».
El coach de banca Jim Riggleman dirigirá al equipo de manera interina.
La decisión se anunció durante un día libre en San Luis. Los Rojos venían de perder un par de juegos seguidos por blanqueada en Milwaukee, la primera vez que quedaron en cero en partidos consecutivos desde 2015.
Price tomó las riendas en medio de una profunda renovación. El balance fue de 279-387 con Price, quien fue designado cuando Dusty Baker fue despedido tras la temporada de 2013 al quedar eliminados en la primera ronda de los playoffs.
Los Rojos sufrieron lesiones significativas durante la pretemporada y arrancaron con su peor inicio desde 1931. Además, la concurrencia al Great American Ball Park se ha desplomado.
Su principal abridor Anthony DeSclafani está fuera indefinidamente por una lesión de oblicuo, luego que se perdió la pasada temporada con una lesión en el codo. El zurdo Brandon Finnegan solo ha podido realizar una apertura por una lesión del bíceps.
También han perdido piezas importantes en su ofensiva. El tercera base venezolano Eugenio Suárez recibió un contrato de 66 millones de dólares por siete años durante los entrenamientos de primavera — la inversión más importante de Cincinnati durante su reconstrucción — pero se fracturó el pulgar derecho por un pelotazo y no se sabe cuándo volverá a jugar. El jardinero derecho Scott Schebler también está fuera por una dolencia en el codo.
Durante las últimas tres campañas, los Rojos han hecho debutar a 32 jugadores. Esa es la mayor cantidad en las mayores.